LiBiUn Esencial
Comunidad de aprendizaje para la formación de competencias de liderazgo
Somos la vida evolucionando
INTERIORIZACIÓN DEL PROPIO COMPORTAMENTO
Imaginar nuestras acciones es muy diferente al simple hecho de actuar. Veamos los efectos trascendentales que esta imaginación produce.
Otras especies diferentes a la humana no pueden tener un comportamiento controlado más allá del que les permite su práctica elemental: aprenden por ensayo-error. La necesidad los impulsa a actuar, su acción genera un efecto que ellos observan, evalúan de inmediato el resultado obtenido, hacen los ajustes correspondientes e insisten hasta que logran satisfacer la necesidad que inició el proceso. Así van moldeando su comportamiento.
Muchos de los ensayos que los animales ejecutan son reacciones reflejas heredadas genéticamente -forma de aprendizaje efectiva pero lentísima-; otras acciones las aprenden, como dijimos, por ensayo, error y corrección, es decir, con la práctica; y otras las aprenden por imitación. La imitación es un mecanismo de aprendizaje característico de animales complejos, que permite la transferencia de conocimientos entre los individuos que forman una comunidad.
A diferencia de los animales salvajes, nuestras mascotas, que ganaron el estatus de animales domésticos, aprendieron a comportarse de acuerdo a los parámetros requeridos en el hogar, porque su cuerpo se los permitió y por el simple hecho de socializar con nosotros, pero difícilmente podrían imaginar su propio comportamiento, pues no tienen el lenguaje suficiente para hacerlo. Nosotros sí podemos describir sus acciones pasadas, presentes y futuras. Incluso podemos imaginar, a través de dichas descripciones, conductas que no corresponden al repertorio natural de su especie, pero que podrían aprender con nuestra ayuda. Y sí que las han aprendido. Algunos animales que deberían ser recordados como héroes, aprendieron las rutinas necesarias para tripular naves espaciales.
Elaboración de Categorías Cognitivas
Categorías cognitivas son las palabras y conceptos que inventamos para dirigir la atención a ciertos aspectos específicos de nuestro entorno. Mediante gestos y ademanes, señales sonoras o figuras plasmadas en alguna superficie sólida, sabemos qué observar. ¿Color, Forma, Tamaño, Textura, Olor, Sabor, Comportamiento, Ritmo, Tendencia, Actitud, Valores, Especies, Tipos, Funciones, Hipótesis, Posibilidades, Conocimientos, Dudas, etc.? Con vocabulario y conceptos apropiados podemos describir los rasgos correspondientes a dichas categorías: Verde, Grande, Rugoso, Generoso, Razonable, etc.
Con palabras, símbolos y signos, elaboramos también ese gran simulador virtual que formamos imaginando situaciones, personajes, artefactos, acciones y sus efectos sobre el escenario imaginado. Nosotros mismos nos convertimos en un personaje central al que observamos desde afuera con los ojos de la imaginación. Así ampliamos enormemente nuestra capacidad de predecir y producir el futuro deseado, regulando nuestro comportamiento en función del pasado recordado y del presente vivido conscientemente. Las Categorías Cognitivas nos permiten interiorizar el propio comportamiento para controlarlo mejor y usarlo de manera más efectiva y eficiente.
En los procesos a través de los cuales aprendemos a coordinarnos con los demás para alcanzar objetivos complejos -fuera de nuestro alcance si intentáramos conseguirlos individualmente-, el uso de categorías cognitivas para describir lo que hacemos y los efectos esperados con dichas acciones, nos permite ir más allá de lo que aprendemos a partir de lo que los simples reflejos instintivos, la imitación y la práctica irreflexiva que brinda la socialización cotidiana, nos permiten. Ser capaces de interiorizar nuestro propio comportamiento aumenta nuestra capacidad de aprendizaje y con ella, nuestras oportunidades de creación y de adaptación.
Los comportamientos del líder
Quienes ejercen en un momento dado funciones de liderazgo, se comportan, como cualquier animal, a partir de necesidades sentidas que los impulsan a actuar instintivamente. Sus acciones pueden orientarse a la satisfacción de sus necesidades individuales solamente, o pueden actuar también para satisfacer las necesidades de alguien más. Este último motivo es el que los convierte en líderes potenciales: actuar en función de las necesidades del otro.
Las conductas de liderazgo tienen raíces genéticas emanadas del cuidado instintivo que amorosamente brindan las madres y los padres a sus crías, de la protección y cuidado que ofrecen los demás miembros de la comunidad a sus semejantes, y de la conveniente cooperación para lograr objetivos complejos necesarios para la supervivencia del clan al que se pertenece; los humanos vamos aprendiendo por ensayo-error, por imitación o a través de procesos educativos formales -como el que estamos diseñando al vivir y reflexionar mediante estas palabras-, las acciones específicas que nos permitirán ejercer LiBiUn: un liderazgo para el bienestar universal. Ya que somos la especie con más recursos a nuestra disposición, hemos ampliado nuestra consciencia a tal punto que ahora asumimos una mayor responsabilidad, y nos proponemos proteger cualquiera forma de vida cuidando los ecosistemas que la sustentan.
LiBiUn
Los comportamientos más sofisticados que constituyen la manifestación palpable, efectiva y eficiente de quienes ejercen LiBiUn, se van aprendiendo a lo largo de la vida partiendo de conductas instintivas, por ensayo-error y por imitación; se ejecutan quizás de manera inconsciente al convivir y coordinarnos con los demás; y se mejoran a través de la reflexión que nos permite la Interiorización del propio comportamiento, gracias a las categorías cognitivas con que las describimos y clasificamos.
Con las descripciones que estamos estudiando, generaremos las Experiencias de Aprendizaje Mediado por medio de las cuales ayudaremos a quienes participen en nuestro diplomado a desarrollar las competencias de liderazgo que les permitirán ejercer LiBiUn en sus familias y en las organizaciones de las que formen parte, contribuyendo así a la conformación de una mejor sociedad. Nuestra función como mediadoras y mediadores requerirá que aprendamos las competencias de liderazgo que enseñaremos. Al dar, recibiremos. Esta es la magia de LiBiUn.
Camilo Sabag